lunes, 22 de diciembre de 2008

Mente aquietada, en silencio

Los veinte discípulos se hallaban sentados sosteniendo cada uno una copa de cristal colmada de agua. A los pocos segundos, el maestro pidió que cada uno golpeara la copa de cristal con la cuchara.

Inmediatamente cundió en la sala un ruido apagado, sórdido, inarmónico y grotesco.


Luego de ello, el Maestro pidió vaciar las copas y golpearlas nuevamente con la cuchara.


Súbitamente, la sala se pobló de un sonido delicado, cristalino y sutil.


Dijo luego el Maestro:


-La mente atestada de razones y argumentos jamás podrá brillar.


Los discípulos comprendieron la necesidad y la virtud del vacío.

.

Enseñanza zen
Foto d la Red

26 comentarios:

Anónimo dijo...

hola amigo!!!!!!

me encantó este cuento que nos lleva a meditar, justamente en una época de necesidad meternos para adentro...............
gracias querido amigo!!!!!!!!

Caballero Guardian dijo...

Me ha encantado ..casi parece la respuesta a una pregunta que no habia sido dicha ...

gracias por su sabiduria de este dia

sinespacio dijo...

Es casi como la sonoridad del silencio... es armonioso ¿no es verdad?
Un abrazo

maracuyá dijo...

qué hermosos Juan...ojalá y especialmente en esto días podamos vaciar nuestras mentes de razones y argumentos y nos dispongamos a regalar un sonido cristalino. Te abrazo

Mayela Bou dijo...

QUE BELLEZA!
MUCHAS GRACIAS POR COMPARTIRLO CON TUS AMIGOS!
ABRAZOS!

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

Hola, Juan...

Sabia conclusión, las mentes limpias son las más brillantes.

¡Feliz Navidad!

Una abrazo.

entreluces dijo...

Es cierto, estoy convencida que cuando una se vacía le llegan todas las riquezas, la nada para poder "ser". Encantada de tropezarme con tu espacio, te dejo un saludo.

Soñadora dijo...

Juan Antonio, y cuánta razón llevaba el maestro. A mí en lo cotidiano me sucede que mi mente almacena tanta información de trabajo, que me detengo, y empiezo a apuntar las cosas, y luego puedo reiniciar con la mente mas tranquila.
Besitos y feliz navidad.

La Morada dijo...

Excelente post Juan, que necesario es tener la mente descansada y limpia, libre de resentimientos y malos deseos.

Saludos!

Colo dijo...

Una maravilla el cuento y también la conclusión...

Felicidades y todo lo mejor para vos!!!

Un abrazo

misticaluz dijo...

Querido Juan, con mis mejores deseos de armonía y felicidad interior para ti y los tuyos, recibe un fuerte y afectuoso abrazo.

Un beso.

Liberto Brau dijo...

Hace más de un mes que no paso por tu “casa”, espero-deseo que me disculpes pues he estado de viaje vagamundeando y en Essaouira escribiendo los dos últimos capítulos de AMANECE PÚRPURA y buena parte del próximo que espero publicar para tus ojos en los próximos días. Ayer tarde llegué a la isla a pasar estos días de Navidad y del nuevo año. Ya descansado aprovecharé estos días “en paz” para visitaros, mis lectores, y beber una copita del champagne de vuestras palabras. El que escribe debe leer, por supuesto. En esta ceremonia de la lectura fundamenta su alquimia.

Que seas feliz… No hay nada mejor ni superior que te pueda regalar hoy… Te lo escribo de corazón.

Liberto-Pau_Pablo

toñi dijo...

Muy hemoso. Gracias por compartirlo.
Feliz navidad y mis mejores deseos para el proximo año.

Un beso

Nerina Thomas dijo...

Buen mensaje, como siempre. Gracias sabio por elegir esos mimos para que pensemos todos.
te dejo un abrazo amoroso Juan y mañana me voy a la costa , al Mar a descansar una semana. A mi regreso te visito, no me extrañes!!
lo mejor en el año venidero.

Anónimo dijo...

Hola Juan Antonio: muy bonito este cuento zen. Es interesante ver qué hace cada uno con el vacío.En el mejor de los casos, moviliza el deseo

Un fuerte abrazo y Feliz Año Nuevo

mj dijo...

Maravilloso tu post Juan...
Te deseo un feliz 2009 y que nos sigas enseñando todo esto en el próximo año.
Un beso
mj

Juan Antonio dijo...

Querid@s amig@s

Adrisol
Caballero Azul
Sinespacio
Mara y Cuyá
Mayela
Rafael
Entreluces
Soñadora
Moradita
Colo
Beatriz
Liberto Brau
Toñi
Nerina
Faladomi
María José

Agradezco vuestra cariñosa visita.
Les deseo un Feliz Año Nuevo lleno de Paz, Amor y Prosperidad.

Un abrazo fuerte.

Haideé Iglesias dijo...

Sólo estas sencillas palabras:

Suerte, suerte, suerte… mucha suerte con las uvas que encontré esta tarde en la playa, si, sincronicidad…
Un abrazo

Lidia M. Domes dijo...

Ese vacío que te conecta con la Verdad interior...

Paso a dejarte un fuerte abrazo y mis mejores deseos!!!

Lidia

Anónimo dijo...

No conocía tu bitácora, ahora ya esto enganchado. Memorias tantas desde el Almacén de Los Picos.

Steki dijo...

Hola Juan!
Te he estado buscando y no encotraba tu blog y ahora te encuentro tan al final de mi lista.
Me estaba extrañando este silencio tuyo y quería saber de ti, si estás bien.
Quería dejarte un abrazo muy muy fuerte y desearte mucha paz y armonía para tu vida en este nuevo año.
Hazme saber que estás bien, sí?
Sé feliz!
BACI, STEKI.

Yansidara dijo...

Muchas gracias Juan, amigo, por instruirnos poco a poco, con las enseñanzas de El Ilúminado.
Siempre,
Y

Recomenzar dijo...

Es tan lindo lo que escribiste que te pongo conmigo en mi blog para leerte más de una vez
besos con sabor a Reyes...

Anónimo dijo...

Hola Juan:
Es hermosa la enseñanza Zen, solo podemos “ser” si nos vaciamos de nosotros mismos. Difícil…
Gracias por invitarnos a reflexionar.
Un cordial abrazo

Salvador Pérez Alayón dijo...

Tras tu comentario a ICUE he sentido el impulso de ojear tu blob. Primera sorpresa: descubrir que eres canario; segunda: tu artículo sobre tu visita a Lanzarote. Observarás que he husmeado por tus blogs.
Yo soy canario y de Lanzarote. No sé que época fue cuando lo del viaje a Lanzarote, pero quizá hasta nos tropezamos. Hablas de Heraclio Niz, pollo de Arrecife. Fue un gran luchador muy famoso en toda canaria y condecorado por Fraga Iribarne con la medalla al turismo, pues como ustedes, todos los foráneos tropezaban con él.
Muy profundo la lección que se desprende del cuento. Ocurre que pasamos inadvertidos muchas veces por el mismo lugar sin pararnos a reflexionar por donde vamos. Vamos llenos de muchas cosas que nos impiden mirarnos y oirnos y ver que hay otro horizonte y otros valores que permanecen siempre y nunca envejecen.
Un abrazo y encantado de conocerte.

Mauro dijo...

...Excelente...!

...tambien...para llenar La Copa...primero hay que vaciarla...

un abrazo

Mauro