lunes, 22 de marzo de 2010

Terremoto de Chile: Las dos caras del ser humano

Los carabineros realizaron una gran labor organizando y salvando a los damnificados.

El día 27 de febrero, a las 3.34 de la mañana, la tierra estuvo temblando durante dos minutos y medio. Fue toda una eternidad. Las casas eran zarandeadas por una enorme fuerza invisible de tal forma que parecían de papel, la tierra no paraba de dar saltos que casi nos tiraba al suelo. Luego, todo se quedó en silencio, estremecedor. Todos los vecinos salimos a la calle comentando asustados y perplejos el terrible terremoto que habíamos presenciado.
Nosotros fuimos a buscar a nuestra hija que se había ido a pernoctar a Pucón, después de asistir a una discoteca. En el recorrido hacia ella, veíamos cómo cientos de coches huian por temor a otros sismos o a que el volcán Villarrica se reactivara. Algunos vehículos se encontraban fuera de la carretera, averiados, o tal vez desplazados de ella por la fuerza del terremoto. La carretera totalmente a oscuras, todo parecía tétrico. Encendimos la radio y al fin pudimos sintonizar una emisora que no conocíamos, era Radio Pudahuel, de Santiago, la capital. El locutor, Pablo Aguilera, iba informando de las noticias que le llegaban, algunas personas llamaban preocupadas por sus familiares que se encontraban en Concepción, Talcahuano, Constitución y otras zonas devastadas por el terremoto. Se tenían noticias de 8 fallecidos. ¡Qué tragedia!, pensábamos. Más tarde informó Pablito, así lo llamaban los oyentes que se comunicaban con él, que según las autoridades no había alerta de tsunami. Nosotros a oscuras buscábamos a Mayra, por caminos de tierra casi desconocidos, pues en la oscuridad era muy difícil orientarse. Entramos en uno y preguntamos a un señor: ¿Ha visto a Mayra? Él contestó: Lo siento, no la conozco, pero, por favor, dígame: ¿Ha habido muertos?, ¿en qué punto del dial están escuchando la radio? Luego nos comentó que el garaje donde estaban resguardados todos los coches de las casas próximas se había venido abajo y que habían quedado inutilizados. Al fin encontramos a Mayra en casa de unas amigas suyas y, como se encontraban solas, las trajimos a las tres a nuestra casa, puesto que considerábamos que estarían más seguras con nosotros.

Más tarde el locutor comunicaba que ya eran 50 los muertos. La gente seguía llamando y haciendo preguntas a las que Pablito no podía dar respuesta. Luego llegó la noticia que había llegado un tsunami y que había arrasado la costa, encontrando a la mayoría de la gente desprevenida.
Toda la noche estuvimos intentando ponernos en contacto con nuestros familares en otras zonas del país y en el extranjero, pero era imposible, se había cortado todo tipo de comunicación. Posteriormente me enteré que había más información en el exterior que en el mismo país.
Esa terrible noche hubo personas valientes, auténticos héroes, que se dedicaron en cuerpo y alma a salvar a los que se encontraban en grave peligro.
Martina Maturana, una niña de doce años, en la isla de Robinson Crusoe, archipiélago de Juan Fernández, salvó a varios cientos de personas al avisarles del terremoto en Valparaíso, pues lo había escuhado por la radio y ella sabía que posteriormente habría un tsunami, a pesar de que el locutor comentaba que nada de eso ocurriría.
En otro lugar, en Curanipe, la peluquera de 32 años, Fresia Reyes y su novio Rodrigo salvaron a 50 personas trasladándolos al cerro en su camioneta.
Alex Reid, así se da a conocer en Twitter, preparó un mapa con los desperfectos en la Ruta 5, con los caminos alternativos para la gente que quisiera ir a socorrer a aquellos necesitados en los lugares afectados.
También el carabinero José Arévalo alertó a los locales y turistas de la inminente llegada del tsunami después del terremoto, utilizando un megáfono.

Varios pescadores salvaron con sus pequeñas embarcaciones a mucha gente, uno de ellos se lo tragó el tsunami mientras realizaba las labores de traslado de varias personas a zona segura.

Son muchos los héroes anónimos que durante esa noche arriesgaron su vida por los demás.

Sin embargo, se da la paradoja que mientras unos realizaban esa humanitaria labor, otros se dedicaban al pillaje, robando y asaltando los negocios y las casas de la gente que con pánico y mucho dolor se tuvieron que alejar para protegerse en lo alto de los cerros.

Unos cientos procedían de una prisión de Concepción que huyeron al derribarse los muros por efectos del terremoto.

La mayoría de los que arrasaban los centros comerciales, supermercados y tiendas era gente necesitada de comida y agua para alimentar a sus hijos, por miedo a que la situación empeorara y que muriera de hambre algún miembro de su familia.

Lo increible de estos casos de pillaje es que profesionales muy bien situados económicamente fueran fotografiados robando en sus lujosos coches, ocultando su botín en sus mansiones. Esos personajes y todos los que se dedicaron al pillaje ya están siendo llevados ante la corte para que paguen por su osadía y descaro, aprovechándose de la catástrofe en que se sumió el país para dar rienda suelta a sus más bajos instintos.

10 comentarios:

Catalina Zentner Levin dijo...

Chile y Hatí, Haití y Chile, dolor y solidaridad, tristeza y esperanza.

Abrazos,

La Gata Coqueta dijo...

Es todo un homenaje para estas gentes que reseñas que ariesgan su vida por salvar a los demas y yo me huno a el.

Y por otra parte no sabia que pudiera existir gabaciones o se salvasen para asi castigar a los que se aprovechan de los desprotegidos usando el pillage a pesar de tener medios para conseguirlo por diferentes medios, ahí es donde se deja ver el otro yo oculto de personas sin civilización a pesr de darselas de señores.

Un abrazo.

Mari

Abuela Ciber dijo...

Tu relato ha sido leido lentamente, con el respeto que merecen los momentos por ustedes vividos.

Finalizas con ejemplarizantes palabras.

A ti y familia nuestro cariños.

Hada Saltarina dijo...

Me dejas atónita por infinidad de cosas. En primer lugar, destacar esa labor de las personas con sus propios recursos puestos a ayudar, en vez de esperar a instituciones que muchas vecees engañan para no sembrar supuestos pánicos y terminan por hacer más daño. Luego por tanto horror y miedo. Y por último por ese pillaje vergonzoso. Me he quedado muy impactada por la muerte de ese pescador salvando; Dios lo tenga en su gloria.

Querido Juan Antonio, ¿encontraste bien a tu hija? Un muy fuerte abrazo a todos

tia elsa dijo...

Son las dos caras de la misma moneda, lo bueno es rescatar los hechos heroícos, de ello ni escuché ni vi en ningún medio, me enteró gracias a ti. Besos tía Elsa.

Melba Reyes A. dijo...


Supongo que finalemtne encontraste a Mayra, no lo dices.

Ocurre, desgraciadamente, este tipo de vandalismo en momentos tan duros, vivimos esa experiencia en 1972 pero sólo fue gente escasa de recursos.

Un abraz♥ solidario.

SEISITO dijo...

Si amigo, es verdad que hay dos caras pero es mejor quedarse con lo bueno que lo malo deberia cortarse de raiz pero no se puede.
Yo vivo en el norte y me fui interiorisando de a poco por television, y fue muy triste, ademas encontrar gente tan noble como los padres del ZAFRADA ( esta en you tube)(victor)que les regalaron una casa y ellos dijeron que mejor se la regalaran a una vecina que estaba embarazada.
Una pena inmensa por todas las familias que quedaron incompletas.
Bueno se dice que un dia nos tocará algo parecido por el norte ojalá no sea tan pronto y DIOS se apiade.
cariños y hasta otro dia

Soñadora dijo...

Siempre en este tipo de situaciones extremas, se dan actitudes así, justamente extremas.
Es de elogiar a todos aquellos héroes anónimos que sacan valor y ayudan a quienes ni conocen!
Besitos,

Sailor dijo...

Amigo pasaba nuevamente por aqui para saber como te encuentras... despues de lo sucedido... bien? por favor danos señales de vida. Un abrazo... hey!!! recuerda que aqui en Santiago esta personita te aprecia mucho.... un abrazo amigo!!!

Maite dijo...

Omteresante tema.

saludos.

Maite